Evangelio según San Mateo 23,13-22.
"¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas, que cierran a los
hombres el Reino de los Cielos! Ni entran ustedes, ni dejan entrar a los
que quisieran.
¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas,
que recorren mar y tierra para conseguir un prosélito, y cuando lo han
conseguido lo hacen dos veces más digno de la Gehena que ustedes!
¡Ay
de ustedes, guías, ciegos, que dicen: 'Si se jura por el santuario, el
juramento no vale; pero si se jura por el oro del santuario, entonces sí
que vale'!
¡Insensatos y ciegos! ¿Qué es más importante: el oro o el santuario que hace sagrado el oro?
Ustedes
dicen también: 'Si se jura por el altar, el juramento no vale, pero
vale si se jura por la ofrenda que está sobre el altar'.
¡Ciegos! ¿Qué es más importante, la ofrenda o el altar que hace sagrada esa ofrenda?
Ahora bien, jurar por el altar, es jurar por él y por todo lo que está sobre él.
Jurar por el santuario, es jurar por él y por aquel que lo habita.
Jurar por el cielo, es jurar por el trono de Dios y por aquel que está sentado en él.
Reflexion
Desgraciados, guías ciegos
Para edificar la paz se requiere ante todo que se desarraiguen
las causas de discordia entre los hombres, que son las que alimentan las
guerras. Entre esas causas deben desaparecer principalmente las
injusticias. No pocas de éstas provienen de las excesivas desigualdades
económicas y de la lentitud en la aplicación de las soluciones
necesarias. Otras nacen del deseo de dominio y del desprecio por las
personas, y, si ahondamos en los motivos más profundos, brotan de la
envidia, de la desconfianza, de la soberbia y demás pasiones egoístas.
Como el hombre no puede soportar tantas deficiencias en el orden, éstas
hacen que, aun sin haber guerras, el mundo esté plagado sin cesar de
luchas y violencias entre los hombres. Como, además, existen los mismos
males en las relaciones internacionales, es totalmente necesario que,
para vencer y prevenir semejantes males y para reprimir las violencias
desenfrenadas, las instituciones internacionales cooperen y se coordinen
mejor y más firmemente y se estimule sin descanso la creación de
organismos que promuevan la paz.