LECTURAS DEL JUEVES V DE PASCUA 28 DE ABRIL (BLANCO)
Si cumplen mis mandamientos, permanecen en mi amor.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Ex 15, 1-2
Cantemos al Señor, pues su victoria es grande. Mi fortaleza y mi alabanza es el Señor, él es mi salvación. Aleluya.
ORACIÓN COLECTA
Dios
misericordioso, cuya gracia convierte en justos a los descarriados y en
dichosos a los afligidos, actúa con tu poder y concede tus dones, para
que en quienes ya infundiste la justificación por la fe no decaiga la
firmeza de su perseverancia. Por nuestro Señor Jesucristo…
LITURGIA DE LA PALABRA
Juzgo que no se debe importunar a los paganos que se convierten a Dios.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 15, 7-21
Por
aquellos días, después de una larga discusión sobre el asunto de la
circuncisión, Pedro se levantó y dijo a los apóstoles y a los
presbíteros:
"Hermanos:
Ustedes saben que, ya desde los primeros días, Dios me eligió entre
ustedes para que los paganos oyeran, por mi medio, las palabras del
Evangelio y creyeran. Dios, que conoce los corazones, mostró su
aprobación dándoles el Espíritu Santo, igual que a nosotros. No hizo
distinción alguna, ya que purificó sus corazones con la fe.
¿Por
qué quieren irritar a Dios imponiendo sobre los discípulos ese yugo,
que ni nuestros padres ni nosotros hemos podido soportar? Nosotros
creemos que nos salvaremos por la gracia del Señor Jesús, del mismo modo
que ellos".
Toda
la asamblea guardó silencio y se pusieron a oír a Bernabé y a Pablo,
que contaban las grandes señales y prodigios que Dios había hecho entre
los paganos por medio suyo. Cuando terminaron de hablar, Santiago tomó
la palabra y dijo:
"Hermanos,
escúchenme. Pedro nos ha referido cómo, por primera vez, se dignó Dios
escoger entre los paganos un pueblo que fuera suyo. Esto concuerda con
las palabras de los profetas, porque está escrito: Después de estos
sucesos volveré y reconstruiré de nuevo la casa de David, que se había
derrumbado; repararé sus ruinas y la reedificaré, para que el resto de
los hombres busque al Señor, lo mismo que todas las naciones que han
sido consagradas a mi nombre. El Señor que hace estas cosas es quien lo
dice. Él las conoce desde la eternidad.
Por
lo cual, yo juzgo que no se debe molestar a los paganos que se
convierten a Dios; basta prescribirles que se abstengan de la
fornicación, de comer lo inmolado a los ídolos, la sangre y los animales
estrangulados. Si alguien se extraña, Moisés tiene, desde antiguo,
quienes lo predican en las ciudades, puesto que cada sábado se lee en
las sinagogas".
Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.
Del salmo 95
R/. Cantemos la grandeza del Señor. Aleluya.
Cantemos al Señor un nuevo canto, que le cante al Señor toda la tierra; cantemos al Señor y bendigámoslo. R/.
Proclamemos su amor día tras día, su grandeza anunciemos a los pueblos; de nación en nación, sus maravillas. R/.
Caigamos en su templo de rodillas. "Reina el Señor", digamos a los pueblos, gobierna a las naciones con justicia. R/.
ACLAMACIÓN Jn 10, 27
R/. Aleluya, aleluya.
Mis ovejas escuchan mi voz, dice el Señor; yo las conozco y ellas me siguen. R/.
Permanezcan en mi amor para que su alegría sea plena.
Del santo Evangelio según san Juan: 15, 9-11
En
aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Como el Padre me ama, así
los amo yo. Permanezcan en mi amor. Si cumplen mis mandamientos,
permanecen en mi amor; lo mismo que yo cumplo los mandamientos de mi
Padre y permanezco en su amor. Les he dicho esto para que mi alegría
esté en ustedes y su alegría sea plena".
Palabra del Señor.
Gloria a ti Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios
nuestro, que por el santo valor de este sacrificio nos hiciste
participar de tu misma y gloriosa vida divina, concédenos que, así como
hemos conocido tu verdad, de igual manera vivamos de acuerdo con ella.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I- V de Pascua
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN 2 Co 5, 15
Cristo
murió por todos, para que los que viven ya no vivan para sí mismos,
sino para él, que murió y resucitó por ellos. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor,
muéstrate benigno con tu pueblo, y ya que te dignaste alimentarlo con
los misterios celestiales, hazlo pasar de su antigua condición de pecado
a una vida nueva. Por Jesucristo, nuestro Señor.
https://www.facebook.com/snfranciscoxavier.comunidadcatolica
Comentario al Evangelio de hoy
Ciudad Redonda
Queridos amigos:La alegría que nace de quien camina en verdad, está llamada a plenitud. Como sarmientos vivos, que recordábamos ayer, queremos permanecer en el amor de Dios, mostrado en Cristo Jesús.
Muchos cristianos llevamos una vida de mucha actividad. Además, el ritmo social de estos tiempos es acelerado, pretende abarcar mucho: muchas relaciones sociales, muchas reuniones sociales, muchos compromisos sociales, muchos aprendizajes sociales...
Estar de un lado para otro, de una actividad a otra, puede desorientarnos y nublar la experiencia de permanecer unidos a Cristo, de durar en su amor, de perseverar en nuestra comunión con Él, y, a través de Él, con nuestros hermanos. Por eso, en medio de unas cosas y otras, no podemos perder la perspectiva que nos nutre. Conviene que miremos y cuidemos, con frecuencia, las raíces que nos alimentan y dan vida, para que la savia del Resucitado fluya con todo su vigor hacia nuestras ramas, para que siempre tengan vida en abundancia.
La permanencia en Él -que el texto evangélico de hoy nos dice que es permanencia en su amor- se proyecta sobre la alegría de lo que somos –su alegría está en nosotros y así nuestra alegría llegará a plenitud-, y no de lo que hacemos, aunque no podamos dejar de hacer, y nuestras acciones también nos traigan contento, un tímido reflejo del júbilo final.